Para evitar que las persianas enrollables crujan o no bajen correctamente es importante lubricar periódicamente las guías, el rodillo superior, los cojinetes y el sistema de enrollado de la correa.
El producto que te aconsejamos utilizar antes de cada invierno es Svitol cerraduras: lubrica, limpia y protege de la oxidación.
Lubricar los rieles de la persiana enrollable
La falta de deslizamiento puede ser debida a la presencia de suciedad en las guías, además de a la falta de lubricación. Envuelve completamente la persiana enrollable. Rocía Svitol sobre las guías y deja actuar unos minutos. Limpia a fondo las guías con un paño. Ahora que las guías están limpias, rocía de nuevo Svitol para lubricarlas.
Lubricar el rodillo superior
El rodillo de enrollado está compuesto por varias piezas que requieren una correcta lubricación. Baja completamente la persiana. Retira el panel y accede a la caja donde está el rodillo. La primera parte que debe lubricarse en abundancia son los cojinetes situados en los extremos del rodillo. Según los modelos, los cojinetes resultan más o menos accesibles, pero con el aplicador de Svitol conseguirás lubricarlos sin problemas.
La segunda zona por lubricar es la polea lateral que está siempre en contacto con la parte final de las varillas de la persiana. Rocía, deja actuar, limpia y lubrica como has hecho con las guías. De este modo, reduciendo la fricción, eliminarás los posibles ruidos y evitarás que se rompan las varillas, lo que te obligará a realizar molestas y costosas operaciones de sustitución.
Lubricar las partes en contacto con la correa
También los cilindros pequeños y las piezas que regulan el deslizamiento de la correa requieren una lubricación periódica: Rocía Svitol para que el deslizamiento se produzca sin una fricción excesiva y sin el consiguiente desgaste de la correa.
Para que la persiana se deslice bien… ¡Svitol siempre funciona!